Tras unos cuantos días de investigación y la consulta de casi
treinta expedientes de diferentes archivos, estoy en condiciones de adelantar
algunas conclusiones sobre el asunto que ha sido muy comentado entre los
burgaleses este pasado mes de agosto de 2016.
*En esta ocasión empezaré por las conclusiones:
1.-Sobre el tramo de muralla conservado entre lo que era la
puerta Margarita y lo que en su tiempo fue la esgueva de Trascorrales, no se tiene documentación veraz de haber
sido vendida, ni por el Ayuntamiento ni por el Estado. A lo largo de la
investigación me he encontrado con un conflicto constante entre la Hacienda del
Ramo de Guerra (actual Ministerio de Defensa) y el Ayuntamiento, por ver quién
era el propietario de la muralla y por tanto quién podía venderla. En casi
todos los casos era el Estado el que hacía valer su peso por seguir en el siglo
XIX dentro de sus atribuciones para la defensa. En concreto en este tramo, no hemos encontrado ninguna venta de
bienes nacionales que haya quedado registrada en los archivos. En cambio,
hay mucha documentación en la que se estipulan condiciones a la edificación
junto a las murallas, prohibiendo la apertura de puertas y vanos, y obligando a
respetar la servidumbre del paso de ronda exterior en dos metros y medio. Se
dispone de documentación de un intento de venta del exterior de este tramo de
muralla por parte del Ayuntamiento que fue paralizada por el Ramo de Guerra,
como luego veremos.
3.-Las normas urbanísticas, tanto locales, autonómicas como
nacionales, se ocupan de proteger los Bienes de Interés Cultural. En este caso,
al tener la muralla del siglo XIII una protección integral, se obliga tanto a
las entidades públicas, como a propietarios particulares a una serie de
condicionantes que incluso llegan hasta el decoro. Es por ello que no se puede
poner en la parte superior de la muralla, ningún elemento por muy liviano que
sea, que modifique la visión originaria de ésta. La muralla de Burgos está
comprendida dentro de los bienes afectados por el Decreto de 22 de abril de
1949, y por la Ley 16/1985 de Patrimonio Artístico Español. De aquí nace la
obligación recogida en normas posteriores de que” …hay que conservarla, estimándose que no procede autorizar ninguna
instalación que se adose a la muralla, ni sobrepase de ella, tomada como
medianería”.
4.-En el servicio de Licencias del Ayuntamiento de Burgos, se
conceden éstas a salvo de acreditar la propiedad. Con lo cual la concesión de
esta licencia de obra no es en sí un reconocimiento de tenencia. Si me llama la
atención que nadie en el Consistorio reparara en lo curioso del caso, ni
pidiera información a la sección de Patrimonio. En caso de demostrarse la
propiedad municipal de la muralla entiendo que se deberá resarcir a los
afectados de haber arreglado algo que no es suyo. Es muy curioso que la
anterior propietaria en 1997 solicitara al Ayuntamiento el arreglo de esta
muralla, cosa que hizo el Consistorio.
*Y ahora empezamos por el principio.
El día 12 de agosto pasado, me llega una noticia a través de un
compañero del Grupo Político Imagina, Roberto, preguntándome si es posible que
la muralla que se conserva entre la calle Trinidad y la Plaza Alonso Martínez
sea de un particular.
A mi regreso del descanso vacacional el día 16 de agosto me
pongo con ello buscando documentación en el Archivo Municipal. Coincide todo
esto con una proposición que tenemos ya en el horno de Imagina sobre determinar
propiedades municipales en la muralla y la puesta en valor de ésta, en este
caso a instancias de otro compañero, Joaquín.
Tras 15 días de investigación, difícil por lo enrevesado,
puedo hoy escribiros estas líneas con unas conclusiones provisionales, a falta
siempre de que pueda aparecer alguna información que no hemos localizado.
Dará la información que he ido obteniendo, para un trabajo un poco más elaborado, sin las prisas de sacar
a la luz la información por la presión mediática del conflicto que se ha
generado.
A lo largo del relato intentaré dejar pruebas documentales de
las aseveraciones que he hecho en el inicio y las signaturas de los expedientes
de donde sale la información.
A.-El intento de enajenación a Luis Díaz Oyuelos.
Luis Díaz Oyuelos fue Alcalde de Burgos entre 1836 y 1838.
Una de sus iniciativas más novedosas fue el proponer la Ciudad para una nueva
Universidad. Años más tarde, en 1848, opta a la compra al Ayuntamiento de un
terreno junto a la antigua puerta Margarita. Esta casa se corresponde con la
que hace esquina actualmente enfrente de Capitanía, asentándose en su momento
sobre el arranque de la muralla en ese tramo. Es muy interesante el plano que
aportamos elaborado por el arquitecto municipal Bernardino Martínez de Velasco
sobre el terreno que el Ayuntamiento pretendía vender.
Figura en el expediente el Archivo Municipal 11-64
comunicación al Jefe Político Provincial que da su consentimiento diciendo que
se debe hacer en pública subasta. En enero de 1848 se publica el anuncio de la
pública subasta de ”un terreno de propios
contiguo a la muralla a la parte de fuera del Arco de Margarita…”. Se cifra
la venta en 2.062 reales de vellón. Esto ocurre en febrero.
Interesa, para nuestra investigación, tener en cuenta un
documento que está en este mismo expediente municipal, que no es otro que la
renuncia de Bruno Carranza (el propietario en esas fechas de la casa Pza.
Alonso Martínez 4 actual) a optar a la compra de esos terrenos que vendía el
Ayuntamiento de la muralla para fuera. Lo hace en noviembre de 1847.
Este es el proyecto que se presentó al Ayuntamiento para cerrar el terreno que pretendían comprar y que da a la calle Trinidad. |
Unos meses después, en Julio de 1848, el Comandante de
Ingenieros con mando en la Plaza de Burgos, Ladislao de Velasco, comunica al
Ayuntamiento que la casa que se está construyendo junto al Arco de
Margarita que se ha unido “a la antigua muralla, perteneciente al
estado, por el lado de la esgueva ynmediata, sin dejar la servidumbre de ocho
pies que la corresponde por lo menos al pie de toda ella..” debe obligar a
cumplir lo indicado.
Esta comunicación supone un terremoto en el Consistorio que
inicia un proceso de intentar que la Hacienda Militar y Luis Díaz Oyuelos
lleguen a un acuerdo. La cantidad que le pide la administración del Estado (3.700 reales de vellón) es
imposible de aportar por el ex-alcalde que finalmente renuncia a la compra de
esa parte exterior de la muralla, quedándose con lo ya construido. El
Ayuntamiento le devuelve 1.000 reales de vellón hasta que se resuelva el
conflicto de propiedad que ha surgido. En definitiva nada más se supo y
seguramente la única posesión que compró Luis Díaz es la casa que actualmente
está frente a Capitanía, junto a la antigua puerta de Margarita quedándose con
el trozo de muralla que tiró para hacerla. Nada más.
Casi de inmediato a la terminación del intento fallido de compra al Ayuntamiento, Luis Díaz Oyuelos y Fabián Yarto, propietarios de las casas números 5 y 6 de la Plazuela de la Audiencia, junto a la puerta Margarita, inician un expediente ante el Ramo de Guerra para comprar todo el tramo de muralla que va de sus casas hasta la esgueva Trascorrales. Se conserva esta tramitación, en el Archivo General Militar de Segovia (Sección 3ª, División 3ª, Legajo 139).
Ya con anterioridad, en 1847, ambos protagonistas habían comprado un terreno de la muralla pegado a la puerta Margarita y contigua a sus casas que estaban reconstruyendo. En los planos que presentamos se aprecia la ubicación y extensión.
En el capítulo de este blog titulado "La casa de la discordia",explicamos qué ocurrió con la casa de Don Luis en los primeros años del siglo XX, cuando desapareció.
Casi de inmediato a la terminación del intento fallido de compra al Ayuntamiento, Luis Díaz Oyuelos y Fabián Yarto, propietarios de las casas números 5 y 6 de la Plazuela de la Audiencia, junto a la puerta Margarita, inician un expediente ante el Ramo de Guerra para comprar todo el tramo de muralla que va de sus casas hasta la esgueva Trascorrales. Se conserva esta tramitación, en el Archivo General Militar de Segovia (Sección 3ª, División 3ª, Legajo 139).
Ya con anterioridad, en 1847, ambos protagonistas habían comprado un terreno de la muralla pegado a la puerta Margarita y contigua a sus casas que estaban reconstruyendo. En los planos que presentamos se aprecia la ubicación y extensión.
Proyecto presentado para la construcción de las casas junto al Arco Margarita. |
Plano expresivo de lo que desean comprar Luis Díaz de Oyuelos y Fabián Yarto junto al jardín o corral ya adquirido al Ayuntamiento. |
En este momento del relato, vuelve a aparecer Bruno Carranza para intentar comprar la parte de la muralla a la que tenía derecho según lo previsto en la Real Orden de 3 de Diciembre de 1946, por estar contigua su casa a ella. En concreto, solicita al Ministerio de Guerra la venta de 26 pies castellanos de muralla, a contar desde la casa de Oyuelos. La documentación se conserva en el citado legajo del Archivo Militar de Segovia.
El Ministro de la Guerra obtiene la licencia de la Reina para preferir a Bruno Carranza en la compra del trozo de muralla que confina con su casa, que consta de 26 pies castellanos. Y conmina a los otros postores a presentarse a la subasta sin tener preferencia sobre ese trozo concreto, para no vulnerar el espíritu de la Real Orden.
Y así ocurrió. En el Boletín Oficial de la Provincia de Burgos de fecha jueves 15 febrero de 1850, en su página tercera, aparecen dos anuncios de la Intendencia Militar de la Provincia de Burgos para la venta de un trozo de muralla confinante con la casa de Bruno Carranza y otro, con cubo incluido, confinante con "terreno cerrado próximo al Arco de Margarita de la pertenencia de D.Luis Oyuelos y D. Fabián Yarto". Los postores debían presentar ante la Secretaría de la Intendencia sus proposiciones en pliegos cerrados antes de las 12 horas de dicho día, tras haberse informado de la tasación y medición.
Tras múltiples consultas en diferentes archivos, no hemos conseguido obtener la documentación de esta subasta de 1850, que es posible no se conserve.
No obstante hay dos documentos que arrojan luz sobre su resultado.
El primero es una relación hecha por la Comandancia de Ingenieros de Burgos en 27 de marzo de 1863 ( 13 años después de la supuesta subasta), en que se exponen cuáles son "los trozos de las antiguas murallas de Burgos que pertenecen al Ramo de Guerra , y que por no ser necesarios para su servicio, pueden entregarse a la Hacienda Civil para su enagenación, conforme se previene en la Real Orden de 30 de enero de 1859, con expresión de su medición y tasación." Entre los nueve trozos que se relacionan nos interesa el número 4 que dice: "Otro trozo que linda por el N.O. con Propiedad de Policarpo Casado y por el opuesto con id. de D.Bruno Carranza. Tiene 39m51cms de longitud, incluso el cubo, 5m01 de altura y 2m23cms de espesor que hacen 441m41cms cs a 10 rs uno.....................4.414,10 reales de vellón". ( Archivo General Militar de Segovia. Sección 3ª, División 3ª, Legajo 5. año 1863)
El 4 de marzo de 1864 el Ministro de la Guerra comunica al Capitán General de Burgos la resolución de la Reina para que se entreguen a la Hacienda Civil esos trozos de muralla.
La razón principal, es cumplir con una Real Orden de 11 febrero de 1849, donde se establece que la a partir de ese momento sea la Hacienda Civil la que administre al fincas adjudicadas al Servicio de Guerra, reservándose el Ramo de Guerra la propiedad de ellas. También se está en el momento en que el estado está en pleno auge de ventas por la ley desamortizadora de Madoz. De hecho, en los años siguientes a esta puesta a disposición de los trozos de muralla a la Hacienda civil, pueden verse en el Archivo Histórico Provincial varias de ellas.
Hemos de entender que el trozo de muralla que pretendía venderse el día 15 de febrero de 1850 a Oyuelos y Yarto, aún pertenece al Ramo de Guerra en 1863 y, por lo tanto, no fue vendido a nadie. Este es el trozo, que incluye el actual cubo, es el que va desde la casa de Carranza, actual número 3-4 de Plaza Alonso Martínez, hasta la esgueva donde la propiedad, como veremos es de Policarpo Casado desde 1860.
El segundo documento que presentamos, y nos puede dar luz de qué obtuvo Bruno Carranza en aquella subasta, es la certificación de las lindes del edificio desde 1857. Para ello nos hemos documentado en el Registro de la Propiedad número 1 de Burgos (investigando la finca 55.203, inscrita al tomo 4.192 del Archivo, libro 897, folio 38), a la vez que consultando en el Archivo Histórico Provincial ( Protocolos notariales; Fernando Monterrubio, 1857-1863, núm. 7736 y 7723). En este mismo artículo en el Capítulo titulado"Bruno Carranza" damos cuenta detalladamente de cómo sólo tienen como pertenencia de la casa 5,244m lineales, con lo cual, hemos de estimar que esto es lo que compraron en la subasta de 1850. Precisamente a lo que optaban y tenían derecho.
B. La muralla entre San Gil y la esgueva Trascorrales.
Croquis que figura en el expediente conservado en el Archivo Militar de Segovia. Marcado entre 4-4 el terreno exclusivo que Bruno Carranza pide comprar a la Hacienda Militar. 1848-49. |
El Ministro de la Guerra obtiene la licencia de la Reina para preferir a Bruno Carranza en la compra del trozo de muralla que confina con su casa, que consta de 26 pies castellanos. Y conmina a los otros postores a presentarse a la subasta sin tener preferencia sobre ese trozo concreto, para no vulnerar el espíritu de la Real Orden.
Y así ocurrió. En el Boletín Oficial de la Provincia de Burgos de fecha jueves 15 febrero de 1850, en su página tercera, aparecen dos anuncios de la Intendencia Militar de la Provincia de Burgos para la venta de un trozo de muralla confinante con la casa de Bruno Carranza y otro, con cubo incluido, confinante con "terreno cerrado próximo al Arco de Margarita de la pertenencia de D.Luis Oyuelos y D. Fabián Yarto". Los postores debían presentar ante la Secretaría de la Intendencia sus proposiciones en pliegos cerrados antes de las 12 horas de dicho día, tras haberse informado de la tasación y medición.
Anuncio de subasta de trozos de muralla en el Boletín de la Provincia 15 febrero 1850. Archivo Diputación Provincial. |
Anuncio de la subasta de trozos de la antigua muralla junto a la puerta de Margarita. BOP 15 Febrero 1850. |
Tras múltiples consultas en diferentes archivos, no hemos conseguido obtener la documentación de esta subasta de 1850, que es posible no se conserve.
No obstante hay dos documentos que arrojan luz sobre su resultado.
El primero es una relación hecha por la Comandancia de Ingenieros de Burgos en 27 de marzo de 1863 ( 13 años después de la supuesta subasta), en que se exponen cuáles son "los trozos de las antiguas murallas de Burgos que pertenecen al Ramo de Guerra , y que por no ser necesarios para su servicio, pueden entregarse a la Hacienda Civil para su enagenación, conforme se previene en la Real Orden de 30 de enero de 1859, con expresión de su medición y tasación." Entre los nueve trozos que se relacionan nos interesa el número 4 que dice: "Otro trozo que linda por el N.O. con Propiedad de Policarpo Casado y por el opuesto con id. de D.Bruno Carranza. Tiene 39m51cms de longitud, incluso el cubo, 5m01 de altura y 2m23cms de espesor que hacen 441m41cms cs a 10 rs uno.....................4.414,10 reales de vellón". ( Archivo General Militar de Segovia. Sección 3ª, División 3ª, Legajo 5. año 1863)
Relación de trozos aún propiedad del Ramo de Guerra en 1863 que pasan a la Hacienda Civil. |
Detalle que describe el trozo de muralla desde casa de Bruno Carranza a propiedades de Policarpo Casado. Figura como propiedad aún del Ramo de Guerra en 1863. Esta es "la muralla del cenador". |
El 4 de marzo de 1864 el Ministro de la Guerra comunica al Capitán General de Burgos la resolución de la Reina para que se entreguen a la Hacienda Civil esos trozos de muralla.
La razón principal, es cumplir con una Real Orden de 11 febrero de 1849, donde se establece que la a partir de ese momento sea la Hacienda Civil la que administre al fincas adjudicadas al Servicio de Guerra, reservándose el Ramo de Guerra la propiedad de ellas. También se está en el momento en que el estado está en pleno auge de ventas por la ley desamortizadora de Madoz. De hecho, en los años siguientes a esta puesta a disposición de los trozos de muralla a la Hacienda civil, pueden verse en el Archivo Histórico Provincial varias de ellas.
Hemos de entender que el trozo de muralla que pretendía venderse el día 15 de febrero de 1850 a Oyuelos y Yarto, aún pertenece al Ramo de Guerra en 1863 y, por lo tanto, no fue vendido a nadie. Este es el trozo, que incluye el actual cubo, es el que va desde la casa de Carranza, actual número 3-4 de Plaza Alonso Martínez, hasta la esgueva donde la propiedad, como veremos es de Policarpo Casado desde 1860.
El segundo documento que presentamos, y nos puede dar luz de qué obtuvo Bruno Carranza en aquella subasta, es la certificación de las lindes del edificio desde 1857. Para ello nos hemos documentado en el Registro de la Propiedad número 1 de Burgos (investigando la finca 55.203, inscrita al tomo 4.192 del Archivo, libro 897, folio 38), a la vez que consultando en el Archivo Histórico Provincial ( Protocolos notariales; Fernando Monterrubio, 1857-1863, núm. 7736 y 7723). En este mismo artículo en el Capítulo titulado"Bruno Carranza" damos cuenta detalladamente de cómo sólo tienen como pertenencia de la casa 5,244m lineales, con lo cual, hemos de estimar que esto es lo que compraron en la subasta de 1850. Precisamente a lo que optaban y tenían derecho.
B. La muralla entre San Gil y la esgueva Trascorrales.
Pasamos a visionar el expediente del Archivo Municipal 11-55,
en el que Pedro Barriocanal solicita la compra al Ayuntamiento de un terreno de
propios de 3.842 pies cuadrados entre el cementerio de la parroquia de San Gil,
y la casa de Zacarías Domínguez en 1853. A su frente el Convento de la Trinidad
y a las espaldas la muralla.
Una vez más la consulta al Jefe Político de la Provincia sólo
aclara que debe hacerse en pública subasta y acreditarse la propiedad del bien
por parte del vendedor, según establecía el RD de 28 sep 1849.
Aquí es donde salta la noticia de que gran parte del terreno
que se pretende vender, se dio a censo perpetuo a Zacarías Domínguez en 1827
por un canon anual de 45 reales ante el Notario Vicente Mariscal. El dominio
útil es de Domínguez, pero el dominio directo corresponde al Ayuntamiento. Con
lo cual no se puede vender.
Plano donde se documenta la situación y propiedades de la calle Trinidad en esos años. |
C.-Bruno Carranza.
Entre los propietarios que van apareciendo en el plano, el
que más nos interesa seguir la pista es Bruno Carranza, que aparece citado en
el intento de venta a Luis Díaz Oyuelos del trozo de muralla que nos ocupa.
Bruno Carranza tiene una casa en construcción junto a la muralla y justo detrás
de la de Díaz Oyuelos. Corresponde en plano con la actual de Pza. Alonso
Martínez que reclama la propiedad de la muralla al Consistorio.
En el expediente municipal signatura 17-481 del archivo, solicita licencia para reedificar una casa ruinosa en la plazuela de la Audiencia número 3 y 4. El Ayuntamiento le cede un terreno contiguo en la misma plazuela para alinear su casa con las de otros propietarios. Este Bruno Carranza no sabemos si es el mismo o es hijo de otro de igual nombre, que en 1815 fue "mayordomo de propios", o lo que es lo mismo, el encargado por la Corona de recaudar el dinero necesario para la administración de la Ciudad. Tenía éste una "caja de madera fuerte" con tres llaves: una la tenía el Alcalde, otra el Escribano municipal y la tercera era la suya.
El primer documento que nos analiza los límites de esta edificación está en el Archivo Histórico Provincial, en Protocolos Notariales de Fernando de Monterrubio 7736, al folio 767, 3 de Agosto de 1863. Angel Fernández Carranza y su esposa Clotilde Carranza vecinos de Villadiego, venden a Clemente Domínguez media casa que les corresponde por herencia de su tío, Bruno Carranza, en la Plazuela de la Audiencia número 8 de la Capital, por el precio de 4.400 reales.
Unos años antes, en 1857, ante el mismo notario, se hizo la partición de bienes por fallecimiento de Bruno Carranza ( exp. sig.7723 Monterrubio AHPB .15 enero 1857 ). Resulta que entre otras posesiones raíces tenía dos casas nuevas que había edificado en la Plazuela de la Audiencia números 6 y 8; la primera se la deja a su sobrino Anselmo, y la del 8 a sus sobrinas Clotilde y Prudencia. Se puede hacer un seguimiento sin cortes de las siguientes transferencias de propiedad hasta llegar a la actualidad. Y en todas las escrituras de propiedad los límites y posesiones no varían en cuanto a la muralla.
El primer documento que nos analiza los límites de esta edificación está en el Archivo Histórico Provincial, en Protocolos Notariales de Fernando de Monterrubio 7736, al folio 767, 3 de Agosto de 1863. Angel Fernández Carranza y su esposa Clotilde Carranza vecinos de Villadiego, venden a Clemente Domínguez media casa que les corresponde por herencia de su tío, Bruno Carranza, en la Plazuela de la Audiencia número 8 de la Capital, por el precio de 4.400 reales.
Unos años antes, en 1857, ante el mismo notario, se hizo la partición de bienes por fallecimiento de Bruno Carranza ( exp. sig.7723 Monterrubio AHPB .15 enero 1857 ). Resulta que entre otras posesiones raíces tenía dos casas nuevas que había edificado en la Plazuela de la Audiencia números 6 y 8; la primera se la deja a su sobrino Anselmo, y la del 8 a sus sobrinas Clotilde y Prudencia. Se puede hacer un seguimiento sin cortes de las siguientes transferencias de propiedad hasta llegar a la actualidad. Y en todas las escrituras de propiedad los límites y posesiones no varían en cuanto a la muralla.
Clotilde era dueña en pleno dominio de la mitad de esa casa y
”su
parte de muralla que la
pertenece al Oriente”. Dice que linda”al Oriente con jardín de herederos de Don Luis de Oyuelos de esta
vecindad, al mediodía casa de Don Fabián Yarto, Presbítero Canónigo Doctoral de
esta Santa Iglesia Catedral y dicha Plazuela (Plazuela de la Audiencia), poniente otra casa de su hermano Don
Anselmo Carranza Díaz, de esta vecindad, y al norte corral y cuadras del Conde
de Villariezo; cuya otra mitad de la casa
pertenece a su hermana Doña Prudencia Carranza Díaz, vecina de esta
Ciudad con quien la tiene proindiviso”.
Pasados los años y siguiendo en el registro de la Propiedad
número 1 la redacción de las respectivas transmisiones de propiedad de esta
finca, nos encontramos que ya en la inscripción 3ª del 29 de septiembre de 1881,
que especifica claramente cuáles son las mediciones de “su parte de muralla”.
Así dice: ”Casa en la Ciudad de Burgos en
la Plaza de Alonso Martínez, antes de la Audiencia, señalada con el número 8,
con su parte de muralla que la pertenece al Oriente, o sea a la derecha
entrando por donde linda con jardín de la Señora Viuda de Don Luis Díaz
Oyuelos, al Mediodía que es el frente, con casa de Don Ildefonso Díaz y Plaza
de Alonso Martínez, por la izquierda al Poniente casa de Don Lucas Carranza y
por la espalda al Norte, Corral de herederos del Conde de Villariezo,( …).
Y en las mediciones especifica :”..y dos metros seiscientos cuarenta y ocho milímetros al mismo aire (Oriente), que es el grueso del muro o espesor de la
muralla, lindante con el jardín de la señora Viuda de Oyuelos, cuya muralla se prolonga en una línea de
diez y nueve pies, o sea cinco metros doscientos cuarenta y cuatro milímetros,
que son los que pertenecen a la Casa.”
Inscripción de la finca en el Registro de la Propiedad nº 1 de Burgos. |
Es curioso para este relato, encontrarse como la propietaria
anterior del piso del mismo número de la Plaza Alonso Martínez, es decir, el que
ahora reclama propiedad de la muralla, Julita, en 1997 solicita al
Ayuntamiento que repare “la muralla que
está en la Calle Trinidad (a la altura de la Seguridad Social) que se está
cayendo”.
Policarpo Casado fue Alcalde de Burgos entre los años 1861-64
y un acaudalado propietario que en 1875 figura en el primer puesto de la lista
de contribuyentes de la Provincia. También en esas fechas formó parte del
Senado de la Restauración.
En su testamento consultado en el Archivo Histórico
Provincial en Protocolos Notariales de Fernando de Monterrubio 7789, se
detallan las propiedades de éste y su mujer, Juliana Pardo, que disfrutarán sus
hijos Julián, María Concepción y Petronila Casado. Entre ellas hay una casa
cuyo frente da a la Calle Avellanos (Camino Real) y hacia su espalda comprende
varios patios y graneros hasta llegar a la calle Trinidad. Según refieren
comprende varios tramos de la antigua muralla que son de su propiedad. En
origen la primera casa en la Calle Avellanos era de su mujer obtenida por
herencia, a la que luego se fueron añadiendo otras propiedades colindantes por
compra a particulares, el Ayuntamiento o al Estado. En el año 1847 con motivo
del casamiento de Policarpo con Juliana, entre los bienes de ésta se especifica
la casa en la Calle Avellanos números 1,2 y 3; un patio en el centro de la
finca y dos graneros, además de la casa número 6 de la Calle Trinidad; todo
ello valorado en 145.000 ptas.
En 1861, cuando Policarpo ya era Alcalde, La Junta Superior
de Ventas de Bienes Nacionales, saca a pública subasta el trozo de muralla que va desde el antiguo cementerio de la Iglesia de
San Gil hasta 1 pie pasada la esgueva. Los arquitectos Ángel Calleja y Luis
Villanueva de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, llevan a cabo
la tasación de esos terrenos que se enajenan, y lo valoran en un precio de
salida de 7.226,30 reales de vellón. Pedro Arguello gana la subasta por 11.200
reales. Este mismo comprador por las mismas fechas adquiere otro trozo de
muralla en la antigua puerta de Barrantes. Lo sorprendente del caso es que en
el momento de hacer efectivo el primer pago, que lo era en 20 plazos, aparece
el nombre de Policarpo Casado sustituyendo a Arguello. Solicita el primero que
“se declare a su favor el remate de dicha
finca por derecho de tanteo, fundado en la Real Orden de 23 de febrero de
1849”. La Dirección General de Propiedades y derechos del Estado accede a
ello y se lo venden.
También el Ayuntamiento de Burgos entre 1860-61 cuando cubre la esgueva que va a Trascorrales,
entre la calle Trinidad y Avellanos, accede ceder unos terrenos a cambio. A
Policarpo Casado le corresponde la parte cubierta que da a su propiedad y la
otra parte es para Manuel Izquierdo y el Sr. Conde de Bornos, como se ve en el
plano que adjuntamos del expediente del Archivo Municipal 11-118.
En definitiva, que Policarpo Casado se hizo con toda la
edificación interior, incluida la muralla antigua, entre la esgueva y el
cementerio de San Gil que se encontraba junto a la cabecera de la misma, y la
Calle Avellanos en que tenía tres casas y la Trinidad donde tenía otra. Pero
para nuestra investigación no aporta datos al tratarse de otra zona. Sí interesa
la acreditación de cómo se obtuvo la propiedad.
Como hemos indicado antes, el Ejército, a través de sus
representantes en Burgos, cada vez que surgía algún conflicto de propiedades
junto a la muralla, solía mandar comunicados al Ayuntamiento advirtiendo de que
la propia muralla, que no sus terrenos colindantes, eran elemento de la defensa
de la Ciudad, de lo que se encargaba el Ejército, y por lo tanto se debían
cumplir una serie de preceptos o en todo caso debiera ser la Hacienda Militar y
el Estado quien enajenara esos bienes de dominio público.
Ya vimos como en el caso del intento de enajenación a Díaz de
Oyuelos en 1848 hubo problemas porque exigían se dejara 8 pies al exterior de
la muralla para la ronda.
Pocos años después, en 1850, el Alcalde Luis Castrillo envía
una extensa misiva a la Reina Isabel II donde manifiesta que la venta de trozos
de la muralla ha supuesto graves perjuicios a la municipalidad, tanto en la
defensa del baluarte, como en las molestias demoliciones. Se cita la Real Orden
de 23 de febrero de 1849 por la cual se da preferencia al Ayuntamiento si se
presentase como licitador “para evitar
los inconvenientes que la venta pudiera ocasionar (…), o a las miras de ornato
público que la Corporación pudiera tener(…),o que la demolición no
perjudique a ninguna de las propiedades
del Ayuntamiento”. Hago ver que este decreto que se invoca es el mismo que
sirvió a Policarpo Casado para hacerse con la muralla…
En 1874, el Capitán General, ante las obras que se estaban
ejecutando en varios edificios tocando a la muralla entre la Puerta de
Santander y San Gil, hace saber en un escrito, que en ningún caso se debe
permitir abrir huecos o ventanas ni puede ser posible que su cercanía sirva
para escalar la muralla. Se pide que las que sean de propiedad privada cierren
los accesos a ésta, u opten por que sea el Estado quien eleve las murallas.
El Ayuntamiento manda comunicación de lo exigido a los herederos
de Fabián Yarto, Policarpo Casado, Timoteo Arnáiz, Pedro Barriocanal, Nicasio
Vélez, Nicasio Dancausa,etc..todos ellos propietarios de edificios en la Calle
Trinidad. Pueden optar por tapiar puertas y ventanas que den a la muralla o
autorizar a hacer obras “mayores y
reparos” en la muralla de su propiedad. Todos contestan que ya han cerrado
las puertas y ventanas al llegarles la comunicación. Respecto a la muralla que posee, Policarpo Casado
manifiesta que ”podrán hacerse las obras
que se consideren necesarias, si a juicio de los Sres. Ingenieros pueden ser de
alguna utilidad, dada la situación especial en que la muralla del comunicante
se encuentra”, con lo que hemos de entender el mal estado de conservación
de ésta.
La muralla actual que se conserva de la Ciudad de Burgos,
sustituye a otra anterior al siglo XIII. Es a partir de 1276 cuando Alfonso X
el Sabio encarga su construcción para protección de la Ciudad contra los ataques de los sarracenos. Se
tardó más de 100 años en levantar el total del perímetro y debía acoger el
crecimiento urbano que experimentó Burgos con el auge del Camino de Santiago
sobre todo.
El Ministro de Hacienda, Pascual Madoz, en 1855, declaró en
estado de venta”...todos los predios
rústicos y urbanos, censos, foros pertenecientes al Estado, al clero, a las
órdenes militares, a cofradías, obras pías, santuarios…y cualquiera otras
pertenecientes a manos muertas”. Tres cuartas partes de la Ciudad se vieron
afectadas, lo que produjo un lógico cambio urbanístico que fue muy importante.[1]
El crecimiento de población exponencial en el siglo XIX,
pasando de 11.628 habitantes del 1821, a los 30.856 de 1897, casi el triple,
llevaron a un crecimiento urbano que empujaba hacia afuera de las murallas.
Este fue el comienzo de su desaparición, junto con la falta de interés público
en su conservación como monumento histórico. Insensibilidad que saltó hasta bien
entrado el siglo XX.
La Puerta o Arco de Margarita fue edificada en el siglo XVII,
junto al Palacio de las Cuatro Torres (actual Capitanía). Fue erigida en honor
de Doña Margarita de Austria con ocasión de su venida a Burgos, para unirse en
matrimonio con el rey Felipe III. Se derribó en 1863.
Desde siempre hubo dos Palacios que acapararon la Plaza
actual de Alonso Martínez, antes de la Audiencia y más antiguo de las 4 Torres.
En concreto la Casa-Palacio de los
Brizuela que luego pasó a manos del Marqués de Castrofuerte; y en frente de
ésta, el Palacio de los Cartagena, también llamada casas de los Cantos, que fue
adquirido más tarde por Diego González de Medina, Conde de Villariezo.[2]
Al primero se le llamaba Palacio de las 4 torres por tenerlas
en sus 4 esquinas. En 1804 acogió la Contaduría de los Millones, en 1834 se
instaló la Audiencia Territorial, de ahí a pasar a llamarse la Plazuela de la
Audiencia este lugar. Más tarde, en 1859 el Ayuntamiento compra este
Palacio que en los primeros años del
siguiente siglo acogerá la Capitanía Militar. Este edificio fue pensado en su
momento para cárcel pero finalmente el alcalde Timoteo Arnaiz consideró mejor
ubicación la antigua Alhóndiga.
Hace tiempo que algunos solicitamos que en el Ayto. de Burgos
se organice una auténtica sección de protección y puesta en valor del
Patrimonio Cultural, bien dotada de personal y medios.
Por otro lado es conveniente hacer un estudio serio sobre
cuál fue y es la ubicación exacta de
nuestras murallas, ver sus propietarios e intentar ponerlas en valor.
Finalmente, no entro a analizar el documento o expediente
20-1668 del Archivo Municipal, en el cual parece fundar el Ayuntamiento la
posesión de la muralla en el tramo en cuestión ahora, tras la calle Trinidad,
por una cesión de 1973, tras un expediente de dominio. Entiendo que no tiene
que ver con este lugar. Más bien me atrevo a creer que formó parte de las
posesiones de Policarpo Casado.
A falta de más argumentos e información, esto es lo que he
podido averiguar sobre la documentación que se dispone. Salvo error u omisión
es lo que puedo aportar. Espero sirva a quien corresponda.
A mi entender, y por la documentación que existe, es bastante claro que sólo pertenece a la propiedad de Plaza Alonso Martínez 3-4, una pequeña parte de la muralla (5.244m), justo su lateral trasero; siendo la mayor parte, del orden de 39 metros y medio lineales incluyendo el cubo, de propiedad pública, o bien del Estado, o del Ayuntamiento por las cesiones efectuadas.
A mi entender, y por la documentación que existe, es bastante claro que sólo pertenece a la propiedad de Plaza Alonso Martínez 3-4, una pequeña parte de la muralla (5.244m), justo su lateral trasero; siendo la mayor parte, del orden de 39 metros y medio lineales incluyendo el cubo, de propiedad pública, o bien del Estado, o del Ayuntamiento por las cesiones efectuadas.
Mi agradecimiento sincero una vez más a la atención
dispensada en el Archivo Municipal, en el Histórico Provincial y en la Sección
de Patrimonio del Ayuntamiento de Burgos,en el Archivo general Militar de Segovia, en el Archivo de la Diputación Provincial y en la Comandancia de Obras y Gobierno Militar de Burgos.
Una vez más me siento orgulloso de poder colaborar en la
salvaguarda de nuestro Patrimonio y el
rescate del pasado para las generaciones presentes y futuras.
*Documentos consultados:
-Archivo Municipal de Burgos: Signaturas: 20-1668, AD-8759,
11-155, 11-64, 11-118, 20-56, 18-3865, 20-227,
20-209, 20-293, 11-1040, 22-626, 17-483, 17-481, 17-785, 9-642, 17-785, 18-335,
22-629, 22-626, 17-481, 20-150, 18-264,
11-47, 11-29, 11-129, 22-37, 11-155, AD-8920-25, AD-8759-8, 18-1588, FO-22055, AD-5242-10, 20-1508, Acta de
Pleno 21 de Septiembre de 1973 (Libro de Actas 648), y Comisión Permanente 7-9-73, 17-13167,
AD-5242-10, 11-129, 17-13181, 18-3865 y C-1-9-5-2.
-Archivo Histórico Provincial: signaturas: Protocolos
Notariales Fernando de Monterrubio 7789
fols. 132 a 133vto y 1115 y siguientes; y Fernando de Monterrubio 7723 (enero 1857) y 7736 (agosto 1863); libros de Hacienda 43/18 y 321/17-18.
-Archivo General Militar de Segovia: Sección 3ª División3ª Legajos 5 y 139.
-Archivo Diputación Provincial: BOP 15 febrero 1850 pág 3.
-Registro de la Propiedad de Burgos Número 1. Finca número 22 anterior; 55.203 en la actualidad, inscripción 1ª al tomo 4.192, libro 897, folio 38; número 4 de la Pza. Alonso Martínez actual, que corresponde con el número 8 anterior.
-Archivo General Militar de Segovia: Sección 3ª División3ª Legajos 5 y 139.
-Archivo Diputación Provincial: BOP 15 febrero 1850 pág 3.
-Registro de la Propiedad de Burgos Número 1. Finca número 22 anterior; 55.203 en la actualidad, inscripción 1ª al tomo 4.192, libro 897, folio 38; número 4 de la Pza. Alonso Martínez actual, que corresponde con el número 8 anterior.
Jesús Ojeda Calvo, en Burgos a 1 de septiembre de 2016 y 10 abril de 2018.
Contacto.
Correo electrónico: papiojeda@hotmail.com
Twitter: @JessOjedaCalvo
Contacto.
Correo electrónico: papiojeda@hotmail.com
Twitter: @JessOjedaCalvo
menudo trabajo de investigación tan fantástico! enhorabuena!!
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