lunes, febrero 25, 2013


Artículo para prensa. Abril de 2005. Obsérvese lo que decíamos en IU y lo que más tarde ha resultado la gestión del Consorcio para la Gestión de la Variante Ferroviaria de Burgos.

 

SOBRE EL CONSORCIO DEL FERROCARRIL Y OTRAS HIERBAS.

 

            En el último Pleno Municipal IU presentó una proposición en la que en su parte resolutiva, establecía una modificación del PGOU buscando un nuevo trazado de la Ronda Sur para cumplir la resolución de la Consejería de Cultura, que obliga a salvar la Granja de Villargámar por su protección histórico-artística. Un Plan General mal redactado tiene éstas cosas. Prointec diseña una línea recta en un plano sin darse cuenta de que pasa por encima de un conjunto de casas blasonadas(conjunto de capilla, casa señorial y molino) que datan del siglo XVII, y fueron propiedad de la familia de mercaderes de La Moneda.

 

            Según el portavoz del equipo de Gobierno del PP el Sr. Lacalle, esta modificación ya está en marcha “por parte del Consorcio”(sic). En este momento estupefacto me quedé. Sin duda el concejal “popular”quería decir que en la Propuesta de modificaciones urbanísticas que el Consorcio ha recibido de Prointec (y pagado), ya se recoge esta modificación, que lógicamente, aclaró en su segunda intervención, es competencia del Ayuntamiento su aprobación.


 
 

            Pero este teórico “lapsus” esconde una realidad que se intenta disimular a la opinión pública. Y es que en el Consorcio para la Gestión de la Variante Ferroviaria de Burgos, en el que están representados el Ayuntamiento, Caja de Burgos y Caja Círculo, se está proyectando un diseño de la Ciudad liberada del ferrocarril en su zona sur, de espaldas al Ayuntamiento y a la ciudadanía. Ya no se trata sólo de agilizar los instrumentos de gestión por medio de contratos a” firmas invitadas”, ni de garantizar los pagos por medio de préstamos adelantados ( que por cierto, pagaremos todos nosotros con los terrenos liberados de la antigua estación). Ahora se trata de modificaciones urbanísticas, que a mi entender van más allá de las “razones de oportunidad” o de diseño.

 

            La creación de nuevos sectores de suelo urbanizable tras la transformación del antiguo eje ferroviario en una vía estructurante, supone una modificación del Plan General, que más allá de cuestiones jurídicas, son de tal calado, que deben ser objeto de un debate más amplio que el marco estricto del Consorcio y de un grupo de”tecnócratas”. En cualquier caso, apostamos desde IU por un nuevo Plan General que integre estas modificaciones, junto con otras de criterios de sostenibilidad  y reserva de suelo para vivienda pública protegida. De ahí vino nuestra propuesta,  para que si se recalifican zonas de entorno rústico, y se crean nuevos usos residenciales asociados al nuevo bulevar, sirvan para levantar la losa de falta de suelo público para intervenir en el mercado de la vivienda.

 

            Los cuadros macroeconómicos que maneja el Consorcio tanto en el sobrecoste del desvío, como en la urbanización del futuro bulevar, indican que si no se renegocia el Desvío con el Ministerio de Fomento, habrá de financiarse bien por créditos, o con lo de siempre... suelo para vivienda libre. De ahí mi temor, y el de más gente, de que los trabajos que preparan, tanto Prointec(en el planeamiento) como Herzog & De Meuron(en el diseño) integra nuevas zonas “plagadas” de viviendas, y a eso le llaman “propuestas generales de tipo conceptual”.

           

            La “pista” definitiva nos la dio uno de los responsables de la empresa Prointec que reconoció, en la última reunión del Consorcio en la que estaba presente la Junta Directiva del Plan Estratégico,  que Burgos con el actual Plan General dispone de suelo suficiente para el crecimiento de población previsto en los próximos 8 años, pero como “todas las que se hacen se venden”... Esta filosofía del “urbanismo monetario” es la que no compartimos de ninguna manera . Los Ayuntamientos deben de buscar otras vías de financiación que no sea desarrollar todo el suelo de que disponen y más, y seguir con ello encareciendo la vivienda y perjudicando con ello su acceso a las capas más desfavorecidas. Y no hablemos de los costes medioambientales de éste modelo de ciudad.

 

            Apelamos a los grupos políticos que disponen de voto en el Consejo de Administración del Consorcio del Desvío Ferroviario (PP, PSOE, SI) a que no sigan consintiendo estas contrataciones millonarias, sin concurso público, de consultoras, para que nos digan lo que debe ser el urbanismo de Burgos para el siglo XXI, pues lógicamente intentarán “agradar” a quien les paga.

 

 

Fdo. Jesús Ojeda Calvo

Concejal y Portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Burgos.

 

 

            Burgos a 25 de abril de 2005.